iolet(n de la Real Academia 6allega 253 ?
LAS SEPULTURAS DE LA FINCACOLINDANTE CON EL "SARTEGO" ?
Vive el labrador que hace a?os las descubri? y destruy?, y
nos refiere que encontr? seis de construcci?n an?loga a las del
?Sartego?, pero que aunque ten?an la forma de ata?d, carec?an
del rect?ngulo de la cabeza, car?cter invariable de las encontradas
en el n Sartego? . La . orientaci?n era id?ntica a la de aqu?llas; pero
existian otras con orientaci?n de Norte a Sur.
Ni restos ni objetos vi? en ell.as ni en sus inmediaciones, y
tiene la convicci?n de que hay muchas m?s.
Tampoco hall? se?ales de construcciones murales; pero s?
encontr? una construcci?n particular, parecida a un horno, cuyas
piedras estaban calcinadas por la acci?n del fuego; tambi?n fu?
destru?da.
La circunstancia de hallarse preparado el terreno para la
siembra de trigo y pinos, y sobre todo, nuestras ocupaciones pro
fesionales, nos impidieron proseguir los trabajos de investigaci?n.
Hacemos votos para que la Real Academia Gallega se ocupe
de dar cima a estos trabajos, sin duda muy interesantes para la
arqueolog?a.
Jost G. NEBRIL'
ESTANISLAO G. NEBRIL
Cedeira, Noviembre 12 de 1926.
LOS ALTARES PRIMITIVOS DEL AP?STOL SANTIAGO
(Continuaci?n)
Hace sospechar tambi?n que as? deb?a estar este altar, colocada una
piedra arriba y otra abajo, el considerar que no se conoce ning?n altar
antiguo que presente tal anomalia. Todos afectan m?s o menos la forma
de una mesa y nada m?s. No se hall? ninguno del que formasen parte
dos losas y parece que ?ste se construir?a como acostumbraban a cons
truirse todos los dem?s. Ya dejamos anotadas at principio diversas for
mas de altares y ninguno presenta semejante particularidad. Lo que se
pedia era una piedra s?lidamente colocada, como corresponde a un altar
para dar culto a Dios que no es justo se derribe f?cilmente, y nada m?s.
Y para esta solidez, m?s conduc?a la columna apoyada sobre esa piedra