232 jolet?n de. la Real kcademia Gallega.
?Y hablemos ahora de vosotros. Vuestra obra es, en el orden de la
intelectualidad, la m?s grande que se ha hecho en . Galicia. Sin vosotros
no habr?a Academia Gallega. Vosotros la sosteneis para honra de la
patria, con un esfuerzo gigante, luchando en un ambiente dificil, porque
es ambiente con nubes de mercantilismo que apenas permiten ver cosa
tan sutil, tan intangible, tan a?rea como la obra de la Academia.
?A vosotros os deber? Galicia su mayor progreso y su m?s gloriosa
restauraci?n literaria. Cuando vosotros hayais alcanzado la finalidad ac
tual de vuestra labor, se conocer? toda nuestra historia regional y se
podr? escribir en gallego, se sabr? como se debe escribir en gallego, ha
bremos dado el paso definitivo para salir de esa vaguedad que nos aleja
? muchos del cultivo de una lengua adorada, ? la cual no podemos entre
garnoscomo quiere entregarse conoci?ndola, el esclavo de la forma, que
es el orden, la disciplina del lenguaje, la que distingue la : consagraci?n
? las letras de la ignorancia que hasta ellas osa y sobre sus aras babea
sus ; inconsciencias y sus devociones al ?no importa?.
?Hemos hablado de Murgu?a y hemos hablado de la Academia: he
mos hablado de dos aristocracias de la intelectualidad gallega. Hablemos
tambi?n de la santa democracia del trabajo gallego. Ella es la palanca
que pone en movimiento el mecanismo del progreso de Galicia. De ella
salen esos g?rmenes de cultura que desde el brazo gallego van ? las so
ciedades de instrucci?n y desde las sociedades de instrucci?n h?cia los
campos de la peque?a patria. De ella parten esos raudales de vida
nueva que alegran nuestros valles y crean nuestras inteligencias y hacen
creer que los verdaderos gallegos, los mejores, los que nos dignifican y
redimen, est?n fuera de Galicia.
?Por los santos luchadores de este trabajo que llena y vivifica el
mundo; por la Asociaci?n Protectora de la Academia Gallega; por toda
la Colonia; por esta tierra fecunda que nos recibe como hijo y en la cual
viven los gallegos como en el propio solar de sus mayores;. por la prensa,
que sigue con simpat?a nuestra obra; por Galicia y por Espa?a. Y por
aquel viejo venerable, por aquel querido viejo que si en este momento
pudiese contemplarnos agrupados, no alrededor de mi persona sino de
los santos ideales del progreso de Galicia y asoci?ndole como un dios ?
nuestra fiesta, se sentir?a redimido de todos sus dolores, de todas sus
angustias, de todas las fatigas, de su inmensa labor por la peque?a
patria.?
?Durante el banquete hici?ronse varias fotograf?as. Y al terminar la
fiesta, Sol? hizo traer su precioso blocknotes y obtuvo varios magnesios
de escenas en que aparecieron muchos de los comensales.