Boletll?; de la Real Academia G?llega
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apoyase la cubierta (i). No le cabr?a la duda si hubiese conocido nuestras
construcciones y hubiese visto en?ellas lacubierta sostenida en la,misma
t forma que ?l supuso en las r?sticas y prehist?ricas viviendas de las cit?
nias que, para que el'parecido fuese ma's completo, cubr?anse, en opini?n
de quienes las exploraron, de paja y arcilla. .., . .
N h,pod?an, pues, en nuestra Galicia, aprisionada entre.ambas;tierras,
j con parte de las cu?les form? en"kotras '?pocasuna, sola provinci?, y en
las?que'habitaron:'unasmismas gentes, faltar entre los restos de ,otras
?pocas, y sepultadas por el polvo de los siglos, las construcciones que
dichos pueblos'us?ban. Y efectivamente, en diversos puntos de nuestra
f. regi?n, ni bien explorada ni mejor conocida, unas personas amantes de
`y nuestra tierra y aficionadas a estos estudios, lograron hallar, cubiertos
por gruesa capa de tierr?, los cimientos de viviendas circulares, que vie
.,:
nen a confirmarnos m?s que a decirnos, que las chozas de los primitivos
galaicos eran tan parecidas a las descubiertas en Asturias y en Portugal,
como lo son a muchas de las tfpicas pallazas que hoy se levantan en las
n?s apartadas monta?as de Galicia.
a
En las laderas del interesante castro de Tro?a, levantado, con otros
muchos, en la comarca de Mondariz, aparecieron cimientos de casasc?n
dicha forma, y en una de ellas varios molinos de mano, una ?nfora, una
> lanza de hierro y. otros objetos que no dejan lugar a duda sabre el servicio
a que estaban destinadas dichas construcciones; los distinguidos arque?
logos Sres. D. Leandro Saralegui (ya fallecido) y D. Santiago de la Igle
sia,en una de sus exc?rsiones cient?ficas, tuvieron ocasi?n de ver y estu
I diar en lo alto'deI monte de Ancos,' cerca de Jubia, donde suponen que
existi? la Libunca de:?Pomponio Mela, centenares de construcciones cir
i culares que formaban una ciudad amurallada, que ya en el s?glo ix se le
llamaba Vila;vella; y,recient?simos:est?n los ?ltimos descubrimientos lie
vados ? cabo en el monte de Santa Tecla, en la Guardia, donde hace a?os
se hab?an descubierto otras construcciones an?logas, y que demuestrande
una'manera inequivoca que la antigua y olvidada ciudad que se asentaba
v. en lo m?s alto de dicho monte, fuese o n? la Ab?briga de Plinio y de Porn
1 ponio Mela, como algunos suponen, estaba constituida en su mayor?a,por,
casas de planta circular, entre cuyos muros se encuentram desde el pu?al
:' de bronce, hasta la moneda romana. Todo to cu?l comprueba plenamente
que las antiguas ciudades, poblaciones y lugares de Galicia, al ?igualque
Fr` ' (Au milieu de chaque maison ?n bloc de" pierre est dis pos? co 9 P p mme s''il avait
. ~ ~
rift supporter una colonne de bois, sur laquelle le toit se serait appuy6. Plusieurs de ces
blocs out m?me,une, cavit? dans laquelle la poutre pouvait a'.eiabolters. Cartailhac,
I. c., p?gina 275. ,