68 BOLET?N DE' 'LA REAL?'ACADEMIA GALLEGA
habla de la importancia que ?tuvo en el aspecto hist?rico,
politico y militar, recordando que ocupa el quinto lugar en
e1 Indice biogr?fico de los Almirantes de Castilla, redactado
por el mencionado: Esteban de Garibay, a ?ltimos del si
glo xvi, los numerosos privilegios reales que como Almiran
te de la Mar, confirma, y c?mo la Cr?nica de Sancho IV
repetidamente lo menciona ?como magnate influyente en la
Corte de Castilla? .
Discurre acertadamente acerca de si los t?tulos de Almi
rante de Castilla y Almirante de la Mar, eran o no ?digni
dades distintas?, como Fern?ndezDuro, para rebajar la
condici?n de Chari?o, dice, demostrando' el se?or Sarale
gui que ambas eran la misma cosa, lo que dicho acad?mico
negaba, us?ndose, por lo tanto, los dos t?tulos indistinla
mente, y as? ocurre que el propio Garibay llama, incluso,
a Bonifaz, Almirante de la Mar, como Chari?o as? se titu
la en los privilegios reales que confirma, con lo cual puede
afirmarse lo que Fern?ndezDuro, sin raz?n, le niega, es
decir, que fu? Almirante de Castilla, como rn?s adelante, sin
darse cuenta, as? lo reconoce al incluirlo como ?el quinto?,
en el Indice biogr?fico que de ellos insert? en su ?estima
ble? tomo sobre La Marina de Castilla, como Saralegui en
su interesante trabajo dice.
llega, al fin, dicho ilustre escritor, a la parte .m?s di
Heil de este farn.oso pleito, a si Chari?o asisti? a la con
' quista de Sevilla y si tom? o no parte activa en la gloriosa
destrucci?n del famoso puente; a lo .?que Saralegui, como
pens?ndolo un poco, dice: he aqu? dos puntos ?por dem?s
oscuros? ; y como si algo, en ellos, descorazonado estu
viera, sinceramente a?ade, ? en los cuales presumo que ha
de tardarse much() en hacer alguna luz?, reconociendo no
blemente, que carecemos de testimonios ?que los patenti
cen en sentido positivo?, como en efecto es verdad, discu
tiendo con sensatez y mesura, aunque no siempre acertada
mente, como ocurre cuando habla del sepulcro, las razones
que en contra se aducen, como son: la escasa autoridad de la
tradici?n, el examen ?cientifico? de su sepulcro y el re
partimiento de la ciudad conquistada; siendo de recoger y
anotar lo. que dice, cuando a su sepulcro se refiere, de que
prescinde ?por injustificadas, de las exageraciones que con