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BOLET?N DE LA REAL A?ADEMIA GALLEGA 327.. '
? cros,'uno de ellos antropoide y otros ,formados de piedras y medianos
ladrillos rectangulares, y una c?riosa inscripc??n sepulcral de aquella ?
?poca, todo lo cu?l, por.diversas razones ytestimonios, ,hemosid?ntifi
cado, evidentemente, como de la antigu? iglesia:: de. Santiago del Campo,
que figura en los documentos de fundaci?n de aquel famoso monasterio
como : del pr?sb?tero Sentario del que esta iglesia parece haber sido, . ?
en cierto modo, su origen, y cuyo emplazamiento se ignoraba y acerca
del`cual tanto se hab?a' indagado y supuesto, sin haberse nunca Ilegado
? a una afirmaci?n concreta por no haberse dado hasta ahora con sus ves
tigios, aunque nosotros, por diversas razones, en'm?s de una ocasi?n,
ya lo hab?amos supuesto. Algunos de esos ladrillos sepulcrales' figu
ran tambi?nen'nuestra colecci?n, aunque fuera de su antig?edad, nada
de particular ofrecen.
En una; finca de la parroquia de San Pedro de Grandal, en el
ayuntamiento de Villarmayor, comarca : de Puentedeume, apareci? : a ?
principios de 1938, al cavar hondo, una inter?sant? l?pida sepulcral ro
mana, de Afrodita, dedicada, como es natural, a los .?dioses Manes),
con curiosos relieves, entre ellos la, rueda solar y el cuadrante lunar, y??
de la que falta la parte inferior, y conella, la l?nea o l?neas que dec?an
los a?os que dicha Afrodita ten?a cuando muri? y las siglas finales con
que en estas l?pidas suelen expresarse lose piadosos deseos de los fami
liares. Fu? recogida por el propietario del terreno, .nuestro querido
amigo D. Constantino Amado, ' m?d?co de P?entedeume, a quien' debe
mos la primera, noticia y la ocasi?n que tuvimos de conocerla y estu= ?
diarla.
Con motivo de unas excavaciones hechas por nuestro querido ami
go D.' Luis L?pez Riob?o, en 1939, para levantar.un crucero en el alto
del ?coto de Guichar=, en la parroquia de San Rom?n de Encrobas,
ayuntamiento de Cerceda, aparecieron restos de unos muros y cimien
tos que, requeridos por dicho amigo, hemos visitado y reconocido, 'y
qu? no hay duda ninguna que, con .otros que aun se conservan en el ?
alto de dich? coto, pertenecen a la antigua fortaleza medioeval all? em
plazada' por la Iglesia Compostelana y cuya existencia en el siglo xili
consta ya por documento del Rey D. Sancho IV, del aim 1282. ton tal
motivo hemos tenido ocasi?n de conocer y de estudiar los interesarites
restos romdnicos de la iglesi? parroquial, consistentes en el ?bside rec
tangular y parte de los muros laterales de la nave, pues la fachada fu?
levantada de nuevo, alargando r tres varas todo el cuerpo de la iglesia a,
en el a?o 1720, por el conocido ?maestro de obras a Fr. Francisco de
Velasco, del monasterio benedictino de San Martin Pinario, de Santiago,
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