40 1ol?ttin de la Real Academia Sall?ga
EL CONVENTO DE SANTO DOMINGO DE BETANZOS
(CONTINUACI?N)
Persecuci?n del a?o 1820
Despu?s de esta pasajera borrasca, que tan profundas hue
llas dej? en todos los conventos, v?ctimas del saqueo y de la des
trucci?n, sobrevinieron las reformas de nuestros Gobiernos, y el
convento de Santo Domingo de Betanzos deb?a sucumbir, como
todos los que no reun?an en su seno veinticuatro individuos ? or
denados in sacris (que era la inmensa mayor?a de 'ellos) en
virtud de la ley de 25 de Octubre de 1820, votada por las
Cortes. Contaba esta Comunidad con doce religiosos sacerdotes
solamente, siendo prior de la misma el Vicario provincial del
Reino de 'Galicia 'Fr. Francisco Javier S?nchez de la Puerta, cuando
fu? disuelta en el a?o 1821, quedando cerrados convento e igle
sia y sus bienes en poder del Estado; pero la iglesia no tard?
.
de las Animas, que solicit? su apertur? con fecha 2 de Enero de
1822, secundada tal vez por las dem?s Cofrad?as establecidas en
dicha iglesia.
Acerca de la actuaci?n de los Dominicos y de la necesidad
de su permanencia en Betanzos, veamos lo que dec?a e1 referido
Vicario y Prior al Jefe Politico Superior de Galicia, contestando
a un oficio suyo de fecha 13 de Diciembre de 1820, en un informe
sobre estos y otros extremos, dado en el convento de Betanzos el
dia 15 del mismo mes, el cual comienza asi: ?He recibido el ofi
cio de V. E. el 13 de ?ste, en el que se sirve pedirme 'informe acer
ca de la localidad y amplitud, el n?mero de individuos ordenados
in sacris que tiene cada uno de los conventos de mi Orden que hay
en Galicia, y los puntos en donde ser? m?s ?til su permanencia
para ayudar a la distribuci?n del pasto espiritual de los fieles?.,.
Con referencia al convento de que nos ocupamos, dice:
?Si nuestra permanencia es ?til para el pasto espiritual de
los fieles, no me toca? juzgarlo, ni pretendo se me crea . sobre mi
palabra. Si, aseguro, que no comemos el pan sin el sudor y fati
ga, y que a pesar de algunos defectos de que ninguna comunidad,
aun la del apostolado, estuvo exenta, procuramos vivir seg?n nues