$oletin de la Real. Academia Gallega 291
Dice as?:
?D?as de silencio y de olvido pesaban como pl?mbea losa sobre
esta culta Asociaci?n, representaci?n aqu? del organismo m?s genero
maci?n inequ?voca que encierra, la sal?a cruel y despiadada de sus ene
migos, tiene universal importancia.
?Su labor paciente, met?dica, seria y depurada, llega serena, tran
al estudio de todos los cerebros pensadores, a cuantos con su
esclarecido nombre, con su ayuda y consejo la sostienen en el cr?dito
envidiable de que goza en los centros cultos del mundo, porque en to
das partes se mirar? con amor y cari?o la patri?tica y altruista labor
que realiza y a honra tienen, ilustres personalidades del saber mun
dial, ostentar el t?tulo de Correspondiente de la Academia Gallega.
?Y del prestigio que por manera refleja gozan los queridos conte
rr?neos que aqu? a ella pertenecen y de los que la Asociaci?n Inicia
dora y Protectora sostienen para que exista la Real Academia Gallega,
honra ,y gloria de la Galicia culta, probado qued? en la solemne fiesta
"celebrada el domingo.
?Una concurrencia enorme y distinguid?sima, propia de la cultura
y elevaci?n del acto, llen? los salones del Centro Gallego.
?El programa se cumpli? de tal suerte, que si hubo lamentacio
nes fu? por lo corto que a todos pareci?: Las alabanzas por lo selecto,
fueron un?nimes.
?El discurso del Padre Robares, presidente, fu? estrepitosamente
aplaudido; sentido, rebosante de amor sincero por Galicia, puso l?gri
mas de recuerdo y gratitud. Oraci?n que pareci? una plegaria.
?Sigui? el mago del bien decir y expresar, Armada Teijeiro, que
salud? con afecto ?ntimo, con delicados acentos a los nuevos acad?mi
cos. Lo? con toda justicia la obra de la docta corporaci?n gallega y
se?al?, para estudio de los nuevos miembros, dos puntos capitalisimos
? de la historia' patria, no claramente fijados a?n: el escudo y la bande
ra gallegos. Sobre ambos extremos disert?. con su habitual competen
cia. Al terminar, con verdadera pena por parte del auditorio que esta
ba sometido, subyugado al encanto de su dicci?n irreprochable y de su
profundidad amena, una c?lida ovaci?n premi? al exquisito poeta y
.
nombre y en el de sus compa?eros. Profundo estudio sobre las perso
nalidades galicianas que habr? de leerse siempre con avidez fu? la di