4o BOLET?N DE LA' REAL ACADEMIA GALLEGA
vigilancia. es ajena a un esp?ritu sublime,: Este f?a sus ideas
al viento, dejando a cuenta de su imaginaci?n el rumbo. No
forcejea por mantenerse en aquel punto donde ha subido,
porque .,ese mismo estudio es desaire' del estilo. Mejor' vista
tiene una. negligencia, decorosa que una elevaci?n violenta.
Debe tambi?n hacerse cuenta de que a nadie pueden ocurrirle
siempre iguales, locuciones... Estragar?s a mi entender,, el 'es
tilo, quien siempre no diere en ?l mucho m?s a la natura
leza ? que al arte:>> ,(1).
EL ESTILO CIENT?FICO
Despu?s`del estilo literario, el cient?fico, que no pide f1?
res de primavera por adorno, ni deslumbramientos de sol
de ?st?o'p?r numen inspirador, sino seria reposada,' apacible
claridad '' de oto??, embebiendo sus' ideas, informando' 'sus
cl?usulas: Y al decir, se?ores, que despu?s,?del 'literario, el
cient?fico, decimos; en realidad : despu?s del' primero de 'am
bos, ?l del P. Feij?o. ,
Destaca, en efecto, el P. Feij?o en severo, anibient? 'de F'
ciencia que no ha otorgado a?n patente 'de' intron?is??n ? en su
lenguaje a l?s modalidades de la.' lengua de 'Cervantes: La
ciencia fespa?ola, editorialmente hablando, se ha' explicado
hastaentonces len lat?n. Es precisamente el P. 'Feij?o el pri
mer gran sabio que,' rompiendo c?n`los c?nones de estacos
timbre, como antes ha roto con las 'reglas ret?ricas; abre
marcha a la comunicaci?n cient?fica con el pueblo 'y en 'el
pimpi() idioma del pueblo. .Y por lo' mismo que es, el primero
en usar 'el castellano para discurrir sobre asuntos de ciencia,
lo es tambi?n len dar a su estilo cierta especial modalidad, que
lo : pliegue ` y ajuste y adapte debidamente al desarrollo 'de
temas no habituales en el mismo. De aqu? el que sea ?l quien,
.aun abominando como antes hemos dicho de la introducci?n
de extranjerismos en el idioma hispano, se haya "visto' como
(1) Con esta larga cita, tomada de sus Reflexiones sobre la Historia
(t. IV, pp. 172 y ss.) nos dispensamos de aducir aqu? varios juicios simi
lares, diseminados en discursos diversos, en los que el P. Feij6a confirma, e
ilustra elocuentemente la misma doctrina, acerca de las condiciones "fundainen
tales de todo buen estilo literario.
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