BOLET?N DE LA REAL ACADEMIA GALLEGA 429
toree versos, cuando ni el soneto hab?a nacido a?n en Italia,
ni el vate gallego tiene por el ritmo precedentes en la litera
tura italiana, ni; finalmente, el tipo' sonetista de Guido Caval
canti hab?a llegado a nuestra patria.
Algunas particularidades de l?xico s? deben ser tenidas en
cuenta, porque dan fe del arca?smo ling??stico. As? en el
11.9 462 encontramos los t?rminos irmanas, loucanas, avela
nas, que ya no se escrib?an de ese modo en el lenguaje co
rriente del siglo xirr, y que varios autores modernos ?Pelle
grini, J. J. Nunes, etc.?, transcribieron en graf?a moderni
zada. Contribuy? a desorientar algo en este sentido la edici?n
de T. Braga, con el cambio parcial y anticient?fico que us?
en la transcripci?n del c?dice.
En las canciones de Airas Nunes se nota la ausencia neu
m?tica, pero no falta la m?sica interna, que da movilidad a
sus palabras y pensamientos. ?Estuvieron sus c?ntigas acom
pa?adas de m?sica en alg?n tiempo? Men?ndez Pelayo pa
r" rece inclinarse por la afirmativa, y el music?grafo Felipe
Pedrell dice de ?l que es ?m?sico y. poeta, en el que se deja
adivinar que la m?sica importa m?s que la letra?
Despu?s de esto nos interesa detallar, en parte, su riqueza
tem?tica, pues ello determina ,un mejor conocimiento de su
obra. La mayor bibliograf?a y el mayor inter?s est? en el'n?
mero 462, que ya copi? ?ntegro al comienzo del. segundo ca
p?tulo, ,y a cuyo alrededor se centralizan lo que pudi?ramos
llamar aspectos galaicoprovenzales de su l?rica.
Sobre esta lind?sima pastorela emite juicios originales
R. Lapa, y dice, por ejemplo, que, encerrando todo el buco
lismo del siglo xi?, representa una poes?a prestada, ya que su
ficci?n no se adaptaba a nuestro modo' de ser. Y cabe pre
guntarle, ?acaso la inexistencia de otras piezas parecidas ar
guye que , tal g?nero no cabe en nuestra po?tica? ; ?dejar?a
de ser un g?nero en la literatura latina la eleg?a, aunque no
hubiese otra que la de Ovidio ? ; y, ?no ser?a castellan?simo el
madrigal, aunque nd hubiese otro que el de Cetina ? Las acti.
Ludes en contra nada dicen, y raz?ri le llega a Jeanroy para
relacionar las canciones gallegas con otras similares buc?li
, cas francesas.
Dentro de la canci?n brilla por su ausencia el barroquis
mo del 'arte provenzal, y la llaneza de elementos as? formales