298 BOLET?N DE LA +REAL ?'ACADEMIA GALLEGA
entre:.el Cardenal ;Sotomayor y;:.Fr..' Alfonso' Bonhome quien
en ,el mero,hecho dei relacionarse 'con tan grandes personajes
pone de manifiesto su.relevante personalidadl.el altoiconcepto
que de ?l: se ten?a, y la' estimaci?n a que: sus: nobles prendas
le hac?an:' acreedor: No era doctor ni maestro, en Teolog?a;
pero ? t?mpoco`. precisaba de grados acad?micos ni de t?tulos
honor?ficos para brillar con luz propia, como ,astro de .pri
mera magnitud, porque las dotes de ,ingenio, los conocimientos
cient?ficoliterarios y la excelencia de la virtud nol necesitan
de ; la sanci?n 'acad?mica para triunfar, e imponerse al:todo
ele mundo. .Era indudablemente un hombre grande, con esa
grandeza indiscutible que dan el talento,' el estudio, la pr?c
tica de la virtud y el ejercicio constante de las buenas. obras.
Vamos a transcribir' algunos p?rrafos 'muy interesantes
de su dedicatoria, traducidos al castellano. Comienza de este
modo: ?En el nombre de N. Se?or Jesucristo. Al'Ilmo.
Padre y Se?or D. Pedro de Sotomayor; Cardenal espa?ol,
su humilde cl?rigo y. orador .(sin?nimo entonces de ' embaja
dor) Fr. Alfonso Bonhome de la Orden de Predicadores,
residente. en Chipre. Doblo las rodillas de mi coraz?n, ya
que no puedo hacerlo corporalmente por mi ausencia; ,para
besar humildemente con natural ' y devoto' afecto, los pies
de vuestra se?or?a. A fin de que no se admire de lo que 'digo
a . continuaci?n, le prevengo que cre?; ne?e.sario manifestar?,
etc?tera. Llama la atenci?n Bonhome sobre el hecho de que
permanezcan completamente in?ditos entre los cristianos de
Oriente las vidas y los hechos famosos de los grandes santos
y doctores que la Santa Iglesia Romana. ha tenido en todo
tiempo en las naciones occidentales, . desde los confines de
Teutonia y de la Hungr?a hasta Santiago de Galicia; de igual
modo que entre los cristianos de Occidente se ignoran, ..
poco menos los de otros muchos santos y? doctores que flo
recieron en tierras orientales, especialmente en los desiertos
de Egipto y en la Siria, como por ejemplo San Efr?n. De los
grandes anacoretas San Antonio 'y San Macario encu?ntranse
en los libros de los monjes del Egipto cosas magn?ficas' y
muy bellas, que Fr. Alfonso se decidi? a traducir del ?rabe
al lat?n, componiendo un peque?o volumen que dedica al '.3
Cardenal, y advirtiendo que no tradujo m?s que aquellas de
las cuales no ten?an conocimiento los latinos. . .