JURISCONSULTOS GALLEGOS. JUAN MANUEL PAZ NOVOA 95
En la segunda carta, de mayor inter?s para elucidar, siquiera
sea someramente, el pensamiento del gran jurisconsulto orensa
no acerca de la instituci?n que nos ocupa, aqu?l anuncia ya a
Murgu?a que el d?a 20 ?del propio noviembre? saldr? para Ma
drid, decidido a defender ante el Congreso la compa??a gallega,
que, rectificando la opini?n emitida en la carta anterior, entien
de que no es c?ltica, sino germana. Y termina la misiva con estas
palabras que, pese a su brevedad, condensan un fundado juicio
cr?tico sobre tan importante costumbre regional: "Sea de ello lo
que quiera, la instituci?n, por su origen, por el respeto que me
rece a muchas gentes, por lo que estrecha los v?nculos de la
familia, y por lo que dignifica el trabajo, igual (sic) en los bene
ficios del capital, y por otras consideraciones, bien merece que
se la defienda" ".
Juan Manuel Paz Novoa intervino, en efecto; en las sesiones
de aquel Congreso, pronunciando un elocuente discurso 31 en el
cual pidi? que la compa??a gallega tuviese cabida en el C?digo
civil, entonces en elaboraci?n, pues no reg?a a?n la ley de Bases,
que fue aprobada posteriormente, el 11 de mayo de 1888. No
disponemos del texto de ese discurso, ni sabemos si lleg? a ser
impreso o se conserva en las actas del referido Congreso. L?sti
ma que ello nos impida conocer con la necesaria explicitud el
juicio que en aquella se?alada ocasi?n mantuvo Paz Novoa sobre
3? El tenor literal de esa carta de 13 de noviembre de 1866, es el siguiente:
"Mi caro Murgu?a: El 20, si no ocurre novedad, saldr? para Madrid. He estudiado
poco sobre el asunto consabido. Faltan libros y falta tiempo. As? y todo, par?ceme
que algo nuevo e importante puede decirse al defender nuestra conmunaut? faissi
ble. Entiendo que no es c?ltica, sino germana. Entre los celtas hab?a algo diame
tralmente contrario. En la tenure ? guevaire el minorazgo desped?a del hogar a
sus hermanos cuando se casaban. En cambio, hay vestigios claros de la instituci?n
en los pa?ses que nuestros suevi dominaron". Sigue el p?rrafo transcrito en el
texto, iniciado con las palabras "Sea de ello lo que quiera...", y concluye: "No s?
si me decidir? a ello. All? veremos. Si V. da alguna nota a la Regi?n, omita el
decir que voy a tratar tal o cual punto. Que importa mucho no hacer planchas,
y yo no estoy para ello. A ver si V. va tambi?n. Mucho lo celebrar?a. Sabe V. que
es muy suyo y buen amigo. Juan M. Paz. Orense, 13 noviembre."
" Consta este hecho en la carta, que tambi?n poseemos y nos facilit? el mis
mo buen amigo Sr. Naya P?rez, dirigida por A. Salgado ?cuya identidad no
hemos esclarecido todav?a? desde Madrid a Manuel Murgu?a, con fecha 8 de
diciembre de 1886. En ella dice el remitente, aparte otras cosas: "No he ido al
Congreso jur?dico m?s que dos d?as, el de inauguraci?n y el en que pronunci?
Juan Manuel Paz un discursito bastante bien hilado y parlado, que gust? mucho".
N?tese, aparte el inter?s propio de ese comentario, c?mo esa carta y las dem?s
que hemos mencionado, demuestran la autoridad y el respeto que Murgu?a ins
piraba a los intelectuales que con ?l se correspond?an y acud?an habitualmente a
su consejo y asesoramiento en materias hist?ricas y, en general, en temas referentes
a Galicia.