José Fontenla Leal
BOLETÍN DA REAL ACADEMIA GALEGA
AN E X O X V I A nuestros conterráneos Satisfacción íntima embarga el ánimo cuando, sin vacilaciones ni desmayos, sorteando dificultades previstas, vése realiada una labor que no está en razón directa con las fuerzas de que se dispone, y que sólo á virtud de un reiterado encargo social es aceptada. En este caso, encuéntrase hoy la Comisión editora del Album, la cual no consideraría ultimado su cometido, si al hacer en este lugar la presentación del mismo, no expusiese, en la modesta forma que ella puede hacerlo, lo fines que informan su publicación y el accidentado proceso que ha seguido desde Febrero que (tachado: se hizo público y) la Comisión comenzó sus tareas. La Sección de Propaganda, á cuyo cargo está confiado el fomento y progreso de la ?Asociación?, y, por tanto, de la ?Academia?, porque laborar por aquella, e asegurar el sostenimiento de ésta, que, hoy por hoy, carece de vida propia, no podía permanecer indiferente ante un problema económico, (tachado: que no tiene) de difícil solución dentro de los recursos ordinarios con que al presente cuenta la ?Asociación inciadora y protectora de la Real Academia Gallega?. Era menester saldar una deuda que la ?Asociación? tiene contraída con dos beneméritos paisanos, quienes con nobleza y patriotismo laudables, facilitaron la cantidad necesaria para atender á los primeros gastos que originó la constitución en la Coruña del docto organimo, cuya necesidad tanto se dejaba sentir, y que no lejano plazo ha de dar honra y prez á nuestra amadísima región, tanto más ofendida, unas veces inconscientemente, y otras otras por sistema, cuanto más favorecida es de las Musas y el genio de sus hijos la eleva al pináculo de la fama. Se hacía, pues, imprescindible, el acudir á medios extraordinarios: y, entre otros (tachado: estudiados) que ha estudiado la Sección de Propaganda, optó por la publicación de un Boletín, con trabajos de los Académicos, destinando los productos de su venta á los gastos de impresión y á la amortización de dicho crédito. Tomado el acuerdo en este sentido, lo envió á la Directiva, y ésta lo devolvió aprobado, encomendando á la Sección lo llevase á la práctica. A este objeto (tachado: fin) nombróse la oportuna Comisión , cuyos miembros entendieron, desde luego, que debía hacerse algo más que un simple Boletín, y acordaron editar una publicación que respondiese cumplidamente al fin propuesto. Un Album ilustrado, luciendo los primores del fotograbado y de la tipografía moderna, conteniendo el mayor número de trabajos científicos, artísticos y literarios, debido todo ello al genio gallego, fué el pensamiento que acarició la Comisión y que no ha podido ver cristalizado sinó en la modestísima forma que aparece. Mas, si es cierto que no hay en él la esplendidez artística, ni la exuberancia de tra
261
Nº 362