BOLETÍN DA REAL ACADEMIA GALEGA
José Fontenla Leal
banquete celebrado en su obsequio. Allí se encontraron gallegos de elevada posición social dentro y fuera de la colonia que nunca se han distinguido por sus simpatías hacia usted y por su conformidad con la Academia, aunque de paso sea dicho nunca han demostrado tener otros motivos para su malquerencia que su justificada crasa ignorancia. Gracias á la ductilidad de Solá, recogiendo insinuaciones nuestras, han escuchado en esa fiesta lo que tantas veces les hemos dicho en la prensa sin que se dieran por enterados. Yo creo que de esta vez se ha afrmado para siempre el asunto de las subvenciones. Excuso decir á usted, queridísimo D. Manuel, que he tomado muy buena nota de sus conciliadores y paternales consejos. Si yo no hubiera depuesto ya la actitud en que habían colocado á mí y á otros veteranos ciertos irreflexivos actos de la actual Directiva, créame que yo tendría sus exhortaciones por mandatos irrecusables. Si en esta ocasión no hice lo que mi galleguismo y mi conciencia me dictaban, fué sencillamente por la para mí altísima consideración de que le disgustara á usted, por cuya salud y tranquilidad hago votos muy sinceros. Le he leído su carta á mi querido amigo Fontenla, quien la escuchó enternecido, lamentándose de que su característica pereza para escribir ha ya dado motivo á las consideraciones que usted hace. Como quiera que él y yo marchamos al unísono en asuntos de la Asociación y aun de Galicia, puede usted tener por desaparecida la incomodidad que nos mantenía reservados. Buena prueba de ello es la presencia de Fontenla en el banquete al amigo Solá. Yo no he asistido también personalmente, porque el periodismo aquí constituye una verdadera esclavitud. Al terminar de leerle su carta, me rogó que sin pérdida de tiempo le manifestara á usted que tuviera por no escrita su renuncia. Le envío un ejemplar duplicado de nuestro número extraordinario, conmemorando el cuarto aniversario del fallecimiento de Curros. Supongo que habrá recibido los números anteriores, pues se los he mandado todos desde que empezó á publicarse en esta segunda etapa. En esta revista estoy uo interesadísimo, no solo como redactorjefe, sino como uno de los editores que con el enxebre y entusiasta gallego Solloso, la publicamos. Con estos antecedentes, yo me atrevo á rogar á usted, D. Manuel, nos envíe tres ó cuatro cuartillas, que es lo que permite la factura de la revista. El tema puede ser regionalista ó un asunto histórico relacionado con el título. En el caso que su salud le permita complacernos, pues ya sé yo que por buena voluntad no ha de dejar de hacerlo, desearía que hiciese constar en el texto que las cuartillas son escritas expresamente para Suevia. Noos conviene esa manifestación porque aquí se reproducen algunos trabajos de usted y esta gente pudiera atribuir la misma procedencia al trabajo que usted nos mandara. Y suplicándole perdone una vez más mis tremendas latas, termino ésta ofreciéndome incondicionalmente como siempre suyo affmo. amigo que le admira y venera J. Peynó (Recuerdos á Carré. Al Sr. Vaamonde le escribo también en este correo)
Nº 362 260