2 Doleiin de la Real %lcademia Gallega
la Metalurgia Gallega en tiempos remotes, condensando las opiniones
emitidas por los autores arriba citados acerca del mentado pufial que
forma parte de la colecci?n del distinguido arque?logo gallego.
Hard como cuatro meses que en el lecho de un riachuelo que pasa
lamiendo por la banda del E. la estribaci?n de uno de los numerosos
castros protohist?ricos qu? llevo estudiados en la cornarca de Ortiguei
ra?? sea la de los antiguos arrotrebas de los ge?grafos cl?sieos?, y de
que en su d?a me ocupar? extensamente publicando croquis y descrip
ciones, at practicar excavaciones para ahondar el cauce, encontr?se ? .
unos Om 70 de profundidad, incrustado entre el cascajo de los arrastres,
la empu?adura de bronce que muestra el gr?fico. Al recogerla, par
ti?ronsele uno de los remates 6 antenas del porno, la aleta 6 guarda del
mismo lado y el pedazo de hoja de hierro que
Jaun conservaba. Los dos primeros trozos pu
dieron recuperarse volviendo ? unirlos en su 4
correspondiente lugar, pero la parte de hoja,
debido ? los desastrosos efectos de la oxida
~~ry ci?n, deshizose por completo; solo le falta,
r,.,,~c~;,?, pues, ? la empufiadura, el remate de la antena
izquierda, que ya :le hab?a desaparecido de
? viejo ? juzgar por el ?xido c?prico que recu
bre la fractura.
.114:W4 Como se ve, la empufiadura resulta en con
junto semejante ? la que di? ? conocer else
for Villaamil. Solo tres pequefios detalles
establecen alguna ligera diferencia entre ellas:
que la m?a presenta entre las dos antenas, en
~y1 ?r el centro del porno, una hermosa virola peri
q~~l~tjKti4i1A, ~" forme, tambi?n de bronce, , donde remacha el
espigo de hierro de la hoja, de cuyo adita
mento carece la de Mondo?edo, cual carecen
otras europ?as de su mismo estilo; que las
aletas ? guardas, eaidas en sentido de la hoja
f
(?;,la que se adaptaban) no describen una
curva tan pronunciada en esta de Ortigueira como en la de la colecci?n
Villaamil; y, por ?ltimo, que los remates de las dos ramas divergentes