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38? b?lettn de la Real Academia ?allega
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iahoradque"fuerarreellares;''y no met'atrevo.Ja, sostener,m?s'tiempo la
idea que emit? en el tomo IVA,(p?gina'64) ('del Museo 'Espa?oVdeAnti
' ?ietldd s (porque` rib ha'ven?do'lhing?ti texto='ni monumento a'confir
'tilirl?) d?' qu? Ifuesen collares' colocadosa a??amanera de?yugos? (1);,aun
'Ciitifid?{'a?ade luego que' apdr m?s 'que no' haya ?monumento' conocido,
l`e'acult?riCb ni pict?rico; ni 'dato hist?rico'?lgunoposeemos que'autorice
par? `suponer''que' fuesen. adorno dei cuello; ni,aun:' de otra: parte del
'Cuerpo',' yd n? `reehaz?,`en absoluto, fque sea'collar:el primero conocido,
''giie'?dquiri? la Academia de la Historia? (2), id?ntico precisamente al
de Ortigueir?. '"`'" .k i , .., 1'i 16i9+w 1 ,a '4 t ..,
'Pues liien, pes? a la 'negativa del, Sr. :Oviedo 'Arce y:a?las,vacila
''cid??s 'del' Sr:''Vill?amil,yo sigo sustentando, en el, presente,?caso4.el
criteriopri"i?iti"vo; esto' es,'gu'e'son collares r?gidos; llenando por tanto
la' mistiaa' ftznci?rr1stintuaria'que los 'cl?sicos torques;x?por,lo cual se'les
vino designando desde un principio con esta i denominaci?n' y' con , ella
sigue `c?noci?ndoseles. `?Al adorno del cuello'quehoymuy propiamente
'llaniat??s Collar 'L.dij??en 1$72 D. Aureli?no Fern?ndez Guerra,.=ilustre
ahtieuari? de la' Academia de la Historia (3) ,digeron torques los lati
`nos, por ser de metal `retorcido los pritneros'collares?iy de tan antiqu?
'+s mo' ab?lengo que' en los libros b?blicos venos que Fara?n, 1715 a?os
antes' de Jesucristo;?puso al cuello'delJos? torquem?auream ' { l
t' Esta joya ortegalesa, de traza'el?ptica,.con la graniaberturade 195
" mil?metros; que, presenta entre 'sus dos extremos,Tiene precisamente a
' delimbstrar'de manera bien concluyente, que ,no pod?a ser. :destinada :al
adorn? de las 'piernas ni de los brazos, oficiandode, periscelidesi o':de
'"armillae como quiere= Oviedo Arce, y mucho menos,siendo de varilla
angular;' con aristas ,vivas, (correspondiendo una al di?metro menor o
raparte interna);' impropia por tanto 'para ce?ir con su gran, pesory;des
Q:?'quilibrio s;''~los =brazos' o a las piernas, sin producir gran ,molestia.
'l'En'cambio,'co?no ya insinu?, ad?ptase perfectamente. para' suspenderla
del cuello;icayendo sobre:elpecho con las puntas o perillas hacia la nuca.
Tratando del interesant?simo torques lusitano de Almostor, que
(1) ?Productos de l'a M?talnr'gi? G?llega?p?gina i3?'
(2) Idem, ?dem, donde a?ade (p?gina 14) qu? si 'no fuesen collares podr?an haber sido,
por la forma que adoptan, ?d? aquellos objetos que recibieron nombre derivado d?l del astro
de la noche y se empleaban en adorno de las personas y especialmente de las hembras; cual
las lunula, de que habla Isa?as en su increpaci?n a las mujeres de Jerusal?n, por su altivez y
lujo?, y principalmente, nuestro San Isidoro.
(3) Antig?edades; ??l collar de ?ro de Mellid. Las voces torgi;es y torce.., Militares
premios de egipcios, griegos y romanos?, en La Ilustraci?n Espalda y Americana, de 24 de
Enero de 1872: p?gina 51.
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