olet?n de la ;Real Academia Gallega zo,
poco recomendable portada de la Puerta Santa, aprovechando para ella
im?genes y doseletes del antiguo coro construido por el insigne maestro
Mateo, en el pontificado de D. Pedro ` Su?rez de Deza (t). Entre esta
portada y la Puerta Santa queda nn peque?o atrio, cerrado a los lados.
por los ?bsides de San Salvador y de San Pedro. En este' atrio se situaba
el coro de ciegos que entonaba los c?nticos llamados de la Puerta Santa.
Es muy probable que esta manera de honrar al Santo Ap?stol, can
tando sus glorias a la puerta del templo, datase de los primeros tiempos
de las peregrinaciones a nuestro Santuario: Los peregrinos, que ven?an
en caravanas, tra?an sus cantos, himnos, etc., ya para entonarlos durante
su viaje, ya para celebrar el feliz t?rmino de la peregrinaci?n al llegar a
Compostela y postrarse ante el altar de nuestro Santo Ap?stol.
Prueba de ello es el himno de los peregrinos. flamencos, Dum Pater
familias, en el cual, sin duda para alentarse y levantar el animo deca?do s
por las fatigas del viaje, se' intercalan aquellas frases en lengua vulgar:
o ?Herru Sanctiagu!?, ? ?Got Sanctiagu!?, ?!E ultreja!?, ??E sus eja!? :?
?Oh, se?or Santiago! ?Oh, buen Santiago! ?Y, avante! ?E, sus, ea!
Himno cuya m?sica grave y devota, en general, pero grandiosa y entu
siasta al llegar a las exclamaciones dichas, resonaba ya en el siglo xri bajo
las b?vedas de la Bas?lica, y que, por dicha, hemos podido oir con gran
delectaci?n no hace muchos a?os, gracias a Ja acertada interpretaci?n y
traducci?n hechas por el insigne monje de la abad?a de Solesmes, Dom
Pothier.
? `" Otra prueba tenemos en las curios?simas canciones de los peregri
nos de distintas regiones de Francia, publicadas e ilustradas con notas
hist?ricocr?ticas por el muy erudito y docto abate Camille Daux, cro
nista de la di?cesis de Montauban (2), tomadas de. una colecci?n de anti
guoscantos, reimpresa en Troyes en 1718, entre los cuales se hallaban
Las canciones de los peregrinos de Santiago, las cuales hab?an sido tomadas,
a su vez, de un cuaderno de 48 p?ginas impreso en Compostela. ?Qui?n
pudiera descubrir un ejemplar de tan curios?simo cuaderno!
En algunas de estas canciones se va haciendo como el relato del iti
nerario de la peregrinaci?n, en el que se nombran muchos pueblos y
Santuarios del tr?nsito. V?ase lo que dice la estrofa 16 de la Gran Chanson,
al dar cuenta de la llegada al monte del gozo, Monxoy; en gallego (3),
desde el cual ya se divisa la ciudad:
(r) T/id. Hist. S. I. Caledral. L?rEZ FERREIRO. Tomo IV,'pig. 32t. Tomo IX, p?g. 36.
(2) Les chansons des pelerins de Saint7acques por M. l' abb? CAMIT,LE Daux. Montau
ban, Edouard Foresti?, 1899.
(3) El monte de San Marcos, a unos tres kil?metros de Santiago.