$oletfn de la Academia Gallega 159
ello qued? este cuerpo literario equiparado en preeminencias a
los dem?s de la naci?n.
El d?a 30 del propio mes, en la ,sala de juntas de la Reuni?n
Recreativa e Instructiva de Artesanos, celebr?se la sesi?n inaugural .
de la Academia. Fu? acto solemne y brillant?simo, al cfue asistic
ron todas las autoridades y un p?blico numeroso y distinguido.
Di?se lectura al Real Decreto y a diversas comunicaciones y tna
bajos, y pronunci?ronse elocuentes y patri?ticos discursos alusi
vos , a la solemnidad que se estaba oelebrando.
A partir de esta fecha, la Academia entra en un periodo de
gran actividad. En las columnas de su BoLLT?N apareoen notabil?si
mos trabajos de arte, historia, literatura, folklore y otros, debidos
a la pluma de nuestros m?s ilustres escritores; celebra con gran
solemnidad recepciones de distinguidos Acad?micos de N?mero en
Lugo, Orense, Santiago, Vigo, Mondariz y la Coruna; toma parte
en diversas veladas organizadas no s?lo en la capital sine en otras
localidades, debiendo ser especialmente recordada la quo tuvo lu
gar en Vivero el 15 de Septiembre de 1911 con motivo del cente
nario del nacimiento del insigne D. Nicomedes Pastor Diaz, en.
cuya velada D. Manuel Murgu?a ley? un brillant?simo discurso, y
luego el elocuente orador y Numerario D. Marcelo Macias pronun
ci? la oraci?n f?nebre en la funci?n religiosa celebrada en la
iglesia parroquial de dicha villa en memoria del gran poeta, e
igualmente inicia o interviene en cuantos homenajes se tributaron
en honor de las m?s ilustres figuras de nuestro pals: Concepci?n
Arenal, Rosal?a Castro, Vicetto, A??n, Martinez Salazar, Pondal,
Leiras Pulpeiro, Murgu?a, el patriarca de nuestras Letras, cuyo fa
, llecimiento, ocurrido el 2 de Febrero de 1923, despu?s de una glo
riosa existencia de cerca de noventa anos, fu? la p?rdida m?s irre
mediable experimentada por la Academia desde su fundaci?n; Cu
rros Enr?quez, el inmortal poeta, que dentro de muy pocos meses
tendr? erigido un monumento en nuestra capital, costeado por los
fondos patri?ticamente recaudados en Buenos Aires per la ?Comi
si?n Curros Enr?quez ? ; en la Habana, por el Mario de la Marina;
en la Coruna por la Asociaci?n de la Prensa, y por un donativo
del excelent?simo senor Conde del Rivero, obra, dicho monumento,
del ilustre escultor regional Francisco Asorey; y otros gallegos in
signes, fueron, en su memoria, debidamente enaltecidos por esta
Corporaci?n. Tambi?n se tribut? un homenaje al gran poeta lusi
tano Luis de Camoens.