BOLET?N DE LA REAL'. ACADEMIA .GALLEGA 6.
pint? los combates de gladiadores y describi? magistralmente ?dice.
' 'La Cr?nica Balear? la Edad Media.
? Lo dice el lejano peri?dico lo creemos, pues D. Marcelo traz?
como nadie pinturas hist?ricas murales en estilo oratorio. La pro
gresi?n pintoresca, expresiva y en momentos calculados de Castelar
?recu?rdense las famosas conferencias del Ateneo sobre la civili
zaci?n en los cinco primeros siglos del cristianismo? se ajustaba
y retra?a en el p?rrafo marceliano por la obediencia .a'las fuentes
hist?ricas en la descripci?n de lugares y tiempos y en la etopeya
y prosopograf?a de las figuras hist?ricas y por un grave y caden
cioso sentido de la medida, propio de su acendrada formaci?n hu
man?stica ?ciceroniana en este punto?y eclesi?stica, y el dominio
de tratados del arte oratorio como el cl?sico del 'P. Granada y el
casi desconocido libro De perfecto concionatore del" obispo D. Ilde
fonso Mes?a de Tovar (?D. Illdefonsi Mesia de Tovar, ;Villa?asti
nensis, Episcopi Asturicensis. De ver? et falsa gloria. Lib. III.
Cum tractat? de perfecto concionatore.? Cum licentia et privilegio.
Asturicae. Apud Hieronymum Murillum. Armo M. D C.XXIIII'),
no citado, seg?n creemos, por D. Marcelino Men?ndez Pelayo en las
Ideas. Est?ticas y muy le?do por D. Marcelo desde la juventud, No
es de este lugar el estudio de la t?cnica oratoria : de D. Marcelo,
pero ser? siempre lamentable la p?rdida de los sermones pronuncia
dos en templos humildes y ocasiones menos resonantes, que las que
produjeron oraciones perfectas como el, ?Elogio de Feij?o?, o el
Paneg?rico de San Agust?n > en la bas?lica del Escorial. De aqu?
llos se conservan referencias muy escasas.
No hemos podido encontrar los indicados poemas `? Los conven r
tos? y ?Eleg?a a la muerte de un pobre religioso?, ni entre los pu
blicados ni entre los al parecer dispuestos por el autor para ver la
luz p?blica, reunidos en un cuaderno y precedidos de unas p?ginas ,
?Por v?a der?lo o? ?sin indicaci?n de lugar, ni fecha? en quep g g q
aqu?l dice: ?Hijos queridos del alma, si, del obscuro fondo del
caj?n... los saco a las tersas y claras p?ginas de este libro... lo;ha
go... para ver c?mo palpitan en ellos al comp?s del ritmo los m?s
?ntimos y hermosos sentimientos del alma... ?
Como hemos visto, D. Marcelo no se apart? de su vocaci?n
apolog?tica en sus, d?as baleares. No se apart? nunca de la misi?n
sacerdotal como p?rroco, a veces . en circunstancias sumamente i
dif?ciles, y'como orador. Al lado de sus grandes piezas hist?ricas
y biogr?ficas brillan otras como el paneg?rico 'de Santa Marta, el