oletin de la Real Academia Gallega 151
Am?rica doume a lus
p'ros ollos da mi?a cara;
e Galicia, ista Galicia,
douma p'ros ollos da alma.
?Habr? posibilidad de aducir m?s perfecto argumento ad hominen en
pro de esta tesis mia de la adecuaci?n providencial del car?cter gallego
para fundirse espont?neamente en el car?cter cubano y formar la sintesis
psicol?gica que se ofrece a nuestra vista con el espect?culo permanente
de la convivencia sentimental de la colonia gallega en el seno de la socie
dad cubana? tNo es, par ventura, la verdadera Nueva Galicia la que, exulta
y triunfa desde la pr?cer mansi?n del Centro Gallego de la Habana, que
proclama, m?s a?n que la opulencia de una instituci?n, la sincronia afec=
tiva de dos pueblos y las maravillosas cualidades asimilativas del medio en
que se desarrolla? (Continuard).
NOTICIAS
MISS GEORGIANA GODDARD KING
Estuvo en la Coru?a, despu?s de visitar nuevamente Santiago de
Compostela, la ilustre Profesora del Bryn Mawr College, de los Estados
Unidos, Miss Georgiana Goddard King.
Miss King, que recientemente ha a?adido a su valiosa producci?n
de estudios de Arqueologia e Historia de nuestro pals, un libro muy in
teresante titulado PreRomanesque Art in Spain, en el que concede aten
ci?n especial a las manifestaciones de visigotismo y muzarabismo que: se
conservan en monumentos gallegos, fu? recibida y acompa?ada por el
Presidente interino de la Academia, Sr. Carr? Aldao, y los individuos de
la Corporaci?n Sres. del Castillo y Martinez Mor?s.
En su visitaal domicilio de la Academia, le fu? entregado el diplo
ma de Socio Correspondiente, cargo para el que fu? elegida recientemente
la docta Profesora.
El Alcalde de la ciudad y Acad?mico electo, Sr. Cas?s, obsequi? con
un almuerzo a Miss King, al que asistieron varias personalidades, y du
rante el cual se habl? de arte y literatura de Galicia.
EL ARTE CRISTIANO EN GALICIA: UN NOTABILISIMO DESCUBRIMIENTO
En Santa Eulalia de B?veda, t?rmino municipal de Lugo, se ha
efectuado un hallazgo arqueol?gico de verdadera importancia.
Hace a?os que el parroco, al hacer rebajar el terreno del atrio, ob
serv? que cedia el piso en algunos lugares, y guiado por la tradici?n de
que all' se encontraba sepultada una iglesia, excav?, descubriendo algo
que le pareci? digno de conservaci?n y algo que juzg? prudente rellenar